sábado, 17 de marzo de 2012

No nos engañan


Hacen sus campañas vendiéndonos la burra de que nos van a solucionar todos nuestros problemas. Y no les creemos, claro. Así que de ahí podríamos ahorrarnos un pastizal en el futuro.
Cuando llegan al poder, si sustituyen a otras tendencias, achacan a éstas la imposibilidad de cumplir con sus promesas, por la herencia recibida; demasiado negativa, demasiado costosa y demasiado escondida. Gracias a que llegaron ellas y levantaron la alfombra, podemos dar gracias a las diosas de la recuperación de la confianza de los Mercados, que éstos sí que son masculinos por no ser personas, y del resto del mundo. Otra mentira que nos lanzan al comedero y que, como todas las demás, sigue sin afectarnos.
Intentan convencernos de que viven a ras del suelo, como nosotras, y envían mensajes apocalípticos, vía "micros abiertos", para que nos vayamos enterando.
Y ya el sumun. Dicen actuar habiendo entendido el mensaje recibido a través de las urnas y representando el sentir de toda la ciudadanía.
Con esto último no puedo, poto en el comedero y me paso definitivamente al bebedero de alto grado. Una vez pedo perdida, me prometo mil veces no volver a hacerlo jamás, lo de escucharles, dedicarme sólo a mis cosas y ser feliz, aunque el futuro también sea masculino.

No hay comentarios:

Publicar un comentario