martes, 18 de junio de 2013

Ciabogas y bandazos, en busca del rumbo.

Inicié en su día con ganas y dedicación este blog, con las ideas claras en cuanto a objetivos y menos claras en cuanto a la repercusión que podría llegar a tener.

Por el camino, sentí la necesidad de utilizar una plataforma más ágil y que me permitiera tocar diversos frentes simultáneamente, con menos profundidad pero más frecuencia, y generé mi propia página web con una estructura que, concluí, era la más adecuada para mi proyecto, www.bizardun.com, y la he estado utilizando hasta que he descubierto Twitter, de lo que no hace mucho, por cierto.

Tanto blog como web han tenido la repercusión que imaginé cuando los puse en marcha. Ninguna.

Mis hijos y sobrinos se descojonan cuando les pongo al día del número de seguidores que voy cosechando en Twitter, así que tenemos muchos ratos para echar unas risas. Pero sé que todos ellos, de una manera u otra, me siguen. Y me suelen criticar, que si soy demasiado serio, que tengo que ser menos rígido, que tengo que poner chispa, ironía, sarcasmo...

Dentro de lo que puedo, les hago caso. Siempre he sido corredor de fondo, de largos recorridos, y me iré adaptando, en las formas. O eso espero.

Pero hablando de herramientas, que es lo que son las distintas modalidades de comunicación que he venido utilizando, no desecho ninguna y me quedo con todas ellas.

El blog, para desarrollos de cierto recorrido; la página web, para exposiciones más estáticas, de más duración; y Twiter, para el intercambio de fogueo rasante e indiscriminado.

Voy a hacer una aclaración (declaración) necesaria para los escépticos en cuanto a mantener tres frentes como los expuestos.

Antes iba a todos los viajes con mi cámara fotográfica al hombro y dejaba grabados para la posteridad todos los rincones y todos los momentos que consideraba imprescindibles. O sea, todos. Actualmente, viajo con las manos en los bolsillos, viviendo cada momento, en cada rincón, a tope de mis posibilidades.

Por si hace falta más claridad, que me dedico a vivir intensamente en todos los frentes de la vida, y menos a trastear en estos medios, aunque me divierte y por eso lo hago. Así que ni yo mismo voy a exigirme nada al respecto. Lo que sea, y mientras me divierta, será. Eso sí, procuraré hacerlo bien, dignamente. Aunque sólo sea por respeto a los cinco o seis que me seguís.


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